Diariamente, los veterinarios ven cientos de casos de laminitis alrededor del mundo, pero esta enfermedad se ha acentuado considerablemente en Reino Unido.

La laminitis es una condición dolorosa que afecta a los cascos de los caballos. Es la interrupción del flujo sanguíneo a las láminas sensibles e insensibles de los cascos. La inflamación debilita permanentemente, en la mayoría de los casos, las láminas e interfiere con el vínculo entre pared y hueso. En casos graves, incluso, se puede separar el hueso de la pared del casco.

Uno de cada 10 caballos y ponis en Gran Bretaña puede desarrollar al menos un episodio de lamitis cada año, hecho que vuelve a este padecimiento tan común como el cólico; este dato fue arrojado por un estudio realizado por Animal Health Trust (AHT), en Newmarket, Reino Unido, en colaboración con el Royal Veterinary College (RVC), en Hertfordshire, y el Rossdales Equine Hospital, en NEewmarket, financiado por World Horse Welfare.

La publicación fue recientemente publicada y no hizo más que puntualizar que la laminitis debe ser considerada como un importante tema de preocupación referente al bienestar equino.

Comúnmente se cree que la laminitis es una enfermedad de primavera, pero ahora, gracias a este estudio, sabemos que no hay una temporada específica para que esta amenaza ataque en Inglaterra, Escocia y Gales. Los especialistas recomendaron el permanecer atentos y procurar medidas preventivas cuando consideren un periodo de “alto riesgo”.

Se alerta también sobre lo esencial que es reconocer los signos sutiles de episodios potencialmente mortales. Los dueños de equinos informaron, de acuerdo con esta investigación, que la mayoría de los animales laminíticos mostraban signos clínicos “leves e inespecíficos”, incluida la dificultad para girar, una marcha corta o rígida, o cojera en la caminata. Estos síntomas se presentaron en más del 70% de los episodios de laminitis.

Aún así, menos de una cuarta parte de los animales afectados mostraron los signos clásicos más reconocidos, como la postura laminítica típica de mecedora hacia atrás en los talones y anillos de pezuñas divergentes (anillos que son más anchos en el talón que en el dedo del pie).

Otro signo clínico regularmente informado de laminitis por los veterinarios es la presencia de un pulso digital delimitador.  Esto sugiere que los propietarios podrían beneficiarse de ayuda adicional para localizar y evaluar correctamente el pulso digital de sus animales, facilitando así la detección temprana de episodios de laminitis.

Sólo la mitad de los 123 episodios de laminitis informados por propietarios fueron confirmados por un diagnóstico veterinario, informó el equipo de estudio; por lo tanto a pesar de que los veterinarios e investigadores consideren que la laminitis es una emergencia médica, muchos animales con esta condición no reciben atención médica inicial.

Recomendaciones finales

Se aconseja a los propietarios que consulten a sus veterinarios si sospechan de un caso de laminitis o si llegan a notar alguno de los signos clínicos sutiles asociados con esta enfermedad, ya que cuando surjan signos más claros, es porque el daño en el pie ha comenzado.

Un diagnóstico temprano, así como un buen manejo de la situación son cruciales para prevenir daños a largo plazo, mismos que a menudo son irreversibles, en las estructuras del pie afectado por laminitis.

«Nuestros hallazgos indican que la laminitis es más común de lo que pensábamos inicialmente y ocurre a tasas similares a otras preocupaciones de salud de alto bienestar, como el cólico», dijo Danica Pollard, MSc, una científica investigadora postdoctoral en epidemiología y vigilancia de enfermedades en la AHT y RVC. «Los propietarios de caballos y pony deben permanecer vigilantes en todo  momento del año y ser particularmente conscientes de los síntomas más sutiles”.

Con el apoyo continuo de Margaret Giffen Charitable Trust y World Horse Welfare, el siguiente paso en la investigación de la laminitis en 2019 es identificar qué factores de salud y gestión se asociaron colectivamente con el desarrollo de la laminitis en esta población de animales, dijeron los investigadores. Se espera que los resultados estén disponibles más adelante en 2019.