De acuerdo con información de expertos, un zapato (o herradura) perdido generalmente causa poco más que molestia e inconvenientes en un caballo, pero ¿qué sucede cuando se safa sólo la mitad de un herraje y su herrador no se percata rápidamente?
Durante ese tiempo, tu caballo podría lesionarse; lo peor de todo es que cualquier clavo desprendido que todavía esté en la herradura o los clips del zapato podrían penetrar la planta de su pie, causando infecciones y posiblemente lesiones graves a largo plazo.
El herrador Matt Eastwood, asegura que, a veces, depende de ti quitar el zapato suelto antes de que se haga más daño. Quitar una herradura es una habilidad esencial de primeros auxilios que todos los propietarios de caballos deberían poder hacer, y no es tan difícil como parece. Solo necesitas las herramientas y la técnica correctas.
Poner el bienestar primero
Recuerda que quitar un zapato es parte de una respuesta de primeros auxilios para el bienestar de tu caballo. Si no estás seguro de qué hacer, o puedes ver que hay una lesión por penetración, no intentes quitarle la herradura; llama a su veterinario y herrador inmediatamente.
El equipo adecuado
En la mayoría de las tiendas de alimentos y tachuelas puedes comprar (muy económico) el equipo necesario que necesitas para quitar un zapato a un caballo: pinzas de extracción, martillo, escofina, tampón y extractores de clavos.
Las dos herramientas clave que debes tener son una escofina, que usarás para limar los apretones (los extremos de las uñas que están dobladas y martilladas contra el exterior del casco), y los tiradores del herrador, que usarás para quitar el zapato.
Quitar una herradura
1. Es mucho más fácil si tienes ambas manos libres para quitar el zapato, por lo tanto, si es un zapato delantero, mira hacia los cuartos traseros de tu caballo y sostén su pierna entre las rodillas con los pies apuntando hacia el casco trasero opuesto. Si se trata de un zapato trasero, levanta el pie y descansa sobre su muslo interno.
2. Usando la escofina, limpia cada uno de los apretones, esto hará que retirar el herraje sea mucho más fácil. Si estás luchando, sienta el casco de tu caballo en un escalón, o sobre una caja de leche.
3. Muchos herradores recomiendan sacar un clavo a la vez. Esto puede tomar un poco más de tiempo, pero así el zapato simplemente se caerá después de quitar el último clavo. El uso de este método también ejerce menos presión sobre el casco y reduce las posibilidades de dañar la pared del casco.
4. Usando las pinzas de extracción, empuja el clavo contra el zapato. A medida que queda expuesta una mayor parte del clavo, mueve la herradura hacia abajo con los extractores para facilitar su extracción. Repite este proceso hasta que se hayan eliminado todos los clavos.
5. El otro método consiste en sacar con cuidado todo el zapato con unos alicates. Esto requiere más esfuerzo ya que implica tirar del zapato y todos los clavos a la vez.