Dentro de los programas de medicina preventiva se incluyen las vacunaciones, la desparasitación y los cuidados odontológicos, los cuales deben ser realizados en tiempos definidos por un experto, dependiendo de las necesidades de cada rancho o cuadra, así como de las condiciones climatológicas y geográficas.
En esta ocasión te hablaremos sobre el tema de la desparasitación, en torno a la cual hay muchas ideas, tradiciones y la mayoría de las veces, malas prácticas. Cabe destacar que en medicina veterinaria el mal uso de los antiparasitarios ha generado resistencia a la mayoría de los principios activos en muchas especies (E.H. Barnes, R.J. Dobson y 1-A. Barger)
En el caso de los caballos, desde los años 80 que se descubrió la ivermectina, no ha habido otro principio activo que pueda usarse para desparasitar, con excepción de la moxidectina (aunque esta última es una lactona macrocíclica, al igual que la ivermectina).
Desarrollo de un programa de desparasitación
Para poder elaborar un programa adecuado hay que tomar en cuenta los factores ambientales y geográficos, así como la actividad y convivencia de los caballos con otros animales que no tengan los mismos controles o que no sepamos qué tipo de manejo lleven en sus cuadras, además de otros factores importantes que un Médico Veterinario especialista pueda ofrecer, la experiencia que pueda tener el asesor, incluyendo el diagnóstico basado en la evidencia.
Los conteos parasitarios elaborados mediante los coprocultivos pueden ser un excelente diagnóstico para determinar si se tiene un correcto programa de desparasitación, si se están controlando de manera adecuada los parásitos, si existe resistencia a los antiparasitarios o incluso si es posible que se esté administrando una dosis menor de antiparasitario como sucede regularmente en caballos de razas medianas a pesadas, como los Warmblood o Percherones.
El tipo de parásitos que hoy son de importancia en la salud de los equinos ha variado con los que hace 20 o 30 años causaban problemas, por lo que debemos adaptar los programas de desparasitación a las situaciones actuales con productos que estemos seguros tendrán un efecto benéfico en el caballo, así como tiempos y dosis ideales.
Debido a la resistencia que hoy existe debemos ser sumamente cuidadosos con los programas que debemos implementar para poder tener la mayor eficacia posible y así lograr los resultados esperados.
La resistencia se basa en algunas prácticas como el desparasitar de manera innecesaria, usar bajas dosis, el tener una baja conciencia de los tipos de antiparasitarios que existen, así como la importancia de utilizar estrategias de control parasitario, incluso la poca o nula búsqueda de asesoría por parte de un veterinario, o un deficiente diagnóstico de enfermedades.
Un Médico Veterinario especialista es la mejor opción para consultar el mejor programa de desparasitación.
Éxito en esta labor
Ante esto, los objetivos principales de un programa de desparasitación deben ser el limitar las infecciones parasitarias para mantener sanos a los caballos y que de esta forma puedan tener éxito en el deporte o disciplina que estén realizando.
Así mismo, es imposible erradicar totalmente los parásitos, por lo que lo importante es tratar de bajar las cargas parasitarias lo más posible. Las enfermedades derivadas de estos problemas son causadas en su mayoría y con más fuerza en los estados larvarios, ya que los antiparasitarios actúan mayormente hacia las fases adultas; es necesario tener éxito con un programa para evitar que contaminen el medioambiente y de esta manera reducir la posibilidad de infecciones, incluso el entorno puede matar larvas en desarrollo y huevecillos (Nielsen, et al, 2007).
Como resumen, los controles deben ir encaminados hacia minimizar el riesgo de enfermedades parasitarias, controlar el depósito de huevecillos en el medioambiente, además de utilizar los antiparasitarios adecuados para evitar resistencia y hacer el más tratamiento efectivo.
Una buena práctica es poder hacer conteos de huevecillos para determinar las cargas parasitarias y también determinar el tipo de parásitos que encontramos en los ranchos o cuadras.
Las prácticas antiguas de desparasitación deben ser modificadas con base en los estudios e información actual existente que pueda dar fundamentos para un diagnóstico correcto y un programa efectivo. Además de tomar conciencia que el tratar de economizar en la utilización de antiparasitarios que no cumplan con los requerimientos de calidad, evita la eficacia de los programas.
Bernardo Monroy Hernández
