Tanto el herpesvirus equino tipo 1 (EHV-1) como el 4 pueden ser encontrados en la mayoría de las poblaciones de caballos de todo el mundo, pueden provocar enfermedades respiratorias, abortos y alteraciones neurológicas, y la infección puede permanecer latente durante toda la vida del caballo. En el caso del EHV-1, puede provocar síntomas respiratorios (como el EHV-4), pero destaca por su mayor capacidad para causar abortos y afecciones neurológicas.
En este sentido, el cuadro neurológico originado por el EHV-1 —‘EHM’ o mieloencefalopatía por herpesvirus equino— es diferente a las demás enfermedades neurológicas equinas porque se puede transmitir por aerosol directamente de un ejemplar a otro, sin necesidad de la intervención de ningún vector, lo que convierte a esta enfermedad animal en una amenaza en las concentraciones de caballos.
Ahora, precisamente para evitar el contagio, la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell ha desarrollado una nueva prueba para predecir el riesgo de los caballos a contraer EHV-1 durante un brote de la enfermedad.
El nuevo test de diagnóstico, que predice una enfermedad animal potencialmente mortal, indica al propietario del caballo si el équido está en riesgo en el caso de que se desate un brote.
La prueba denominada ‘EHV-1 Risk Evaluation Assay’, desarrollada por Bettina Wagner de la Facultad de Veterinaria de Cornell, está disponible en el Centro de Diagnóstico de Salud Animal de la mencionada universidad estadounidense, y mide el nivel de un anticuerpo clave que protege contra el virus, para determinar el riesgo que presenta el caballo de contraer la enfermedad.
Asimismo, Wagner está utilizando esta y otras pruebas similares para comprender cómo interactúa el sistema inmunitario del caballo con EHV-1 y desarrollar mejores vacunas contra el virus.
“Podemos tomar una muestra de suero y definir si el caballo presenta un riesgo alto o bajo de infección por EHV-1”, ha señalado Wagner, quien ha explicado que la prueba “también proporciona orientación sobre cuándo se debe vacunar al caballo”.
AVANCE FRENTE A LA MIELOENCEFALOPATÍA POR HERPESVIRUS EQUINO
Actualmente no existe ninguna vacuna que impida que los caballos desarrollen la forma neurológica de la enfermedad —mieloencefalopatía por herpesvirus equino—. Además, las vacunas no afectan igual a todos los ejemplares, y el test ayudará con este particular. “Para algunos caballos, el intervalo de vacunación de un año puede estar bien. Para otros, seis meses pueden no ser suficientes. La prueba está diseñada para descubrirlo”, señala Wagner, quien apunta que el test puede ayudar a los veterinarios con el calendario de vacunación.
Además, Wagner ha desarrollado otro test que puede ayudar en el tratamiento de los brotes. Esta prueba indica si un caballo expuesto al virus está protegido y, por lo tanto, puede liberarse de la cuarentena.
Por último, cabe mencionar que la investigación sobre el EHV-1 sigue en marcha y, ahora, plantea estudiar si estos caballos pueden transmitir el virus a otros ejemplares. Además, Wagner se muestra esperanzada y cree que su equipo acabará encontrando una vacuna frente a la mieloencefalopatía por herpesvirus equino.