Según la raza y la edad, hay caballos que tienden a cansarse más que otros luego de una actividad al aire libre como una exposición equina o simplemente estar por cierto tiempo en sus propios corrales.
Por eso es que una práctica que busca relajar los músculos, liberar el estrés, recuperarse de lesiones, y además servir de ayuda general para los equinos, es la hidroterapia.
Tal como pasa en los humanos, esta práctica busca relajar el sistema muscular y generar una sensación de descanso que para el caso de los animales puede ser hasta 30% más provechosa que una jornada de masajes.
Según el veterinario especialista en ortopedia de caballos, Gonzalo Costa, “esta práctica es útil para mejorar el rendimiento físico en los equinos. Aplicando este proceso la recuperación de una lesión puede tardar entre tres y seis meses, dependiendo de la gravedad”.
¿Cómo se puede practicar la hidroterapia? Normalmente se trata de un ejercicio que se realiza en una piscina de forma circular, donde el entrenador o veterinario le da vueltas al caballo con una cuerda. La piscina debe tener un piso de cemento para que el equino no se resbale y una profundidad de unos tres metros.
Las prácticas especializadas de este tipo son escasas en algunos lugares, y muy pocos centros veterinarios ofrecen el servicio, pero usted mismo lo puede hacer en una finca que cuente con una piscina la cual luego debe purificar para el uso humano.
Durante el ejercicio, el caballo empieza a dar vueltas nadando, aumentando el numero de movimientos progresivamente, y con ello su capacidad de nadar. Es así como el equino puede seguir entrenando sin sentir más dolor.
Lo que sucede con esta terapia es que el frió provoca tres reacciones básicas: la primera es a nivel celular, la segunda tiene que ver con la permeabilidad de las paredes de los vasos, que disminuye, y por eso se reduce la cantidad de líquido que se acumula en la zona afectada.
Y por ultimo, el frío adormece, en cierta medida, la zona afectada actuando como analgésico local. Una de las principales ventajas del frío es que no anula los efectos benéficos en el proceso de curación. Lo mejor es cuando la práctica no es de pocos días sino de varias semanas.
Rehabilitación animal
Uno de los muchos beneficios que tiene la hidroterapia es que sirve como método alternativo de fisioterapia y rehabilitación para animales que tienen que retirarse de su preparación física por lesiones músculo-esqueléticas. Sin embargo, no basta con una sesión sino hasta tres rutinas seguidas.
Terapia articular
Con la edad, algunos caballos necesitan de cuidados especiales para sus articulaciones, algunos por el peso que han cargado en su vida no solo con el de jinetes sino el de ellos mismos, requieren pausas que la hidroterapia combate en sesiones desde dos días. Además, fortalece las patas luego de ella.
Tratamiento respiratorio
Adicional a sus ventajas de rehabilitación, moverse a través de la resistencia ejercida por el agua, sin movimientos de impacto, ayuda también a desarrollar una buena capacidad pulmonar, es por esto que se conoce que la hidroterapia aporta una gran capacidad cardiorrespiratoria para caballos de competencia.
Entrenamiento muscular
Las piscinas tradicionalmente se conocen, además de diversión por ser escenarios para fortalecer los músculos. En el caso de los equinos, el contacto con el agua genera un tratamiento para incrementar la masa muscular en el lomo y la parte trasera ya que el esfuerzo se concentra en estas zonas, pero debe ser rutinario.