//Entrenamiento de Salto

Entrenamiento de Salto

Entrenamiento de Salto en casa

Para obtener destreza, el salto requiere práctica, tanto por parte del caballo como del jinete. Si existe algún problema en casa, siempre será peor en competencia. No se deben evadir las cosas difíciles para ninguno sino al contrario, hay que trabajarlas y practicarlas hasta su perfección.

Las barras de tranqueo son un buen ejercicio gimnástico para el caballo. Proporcionan elasticidad y equilibrio, además ejercitan todas sus articulaciones.

El trabajo de laboratorio es enormemente beneficioso. Una simple cruzada y un oxer (ver dibujo) forman el ejercicio más básico, pero a la vez más útil. Una barra de tranqueo lo coloca correctamente para saltar la cruzada desde el trote, y otra barra entre ambos saltos asegura que tome un tranco (la distancia es corta) y que en él se redondee y no hunda el dorso. La distancia corta lo estimula a saltar correctamente y mejorar su técnica.

Este trabajo es mucho fácil que saltar obstáculos desde el galope, pero asegúrese de practicar ambos. El ejemplar tampoco debe saltar demasiado, aunque un par de veces por semana durante media hora está bien. Durante estos entrenamientos se debe incorporar algún laboratorio, y también algún salto desde el galope. Se debe variar el tipo de obstáculos, construyendo dobles, combinaciones y calles. Hay que tomar saltos desde el ángulo, y entrando corto a alguno de entrenamiento, para no tomarlo por sorpresa cuando se salta contrarreloj en una competencia. Pero por razones de seguridad, tenga siempre a alguien cerca. 

Reconocer el recorrido

El jinete debe aprovechar al máximo esta oportunidad para familiarizarse con la distribución de los saltos y con éstos en sí. Hay que concentrarse y no perder el tiempo charlando con los amigos al reconocer el recorrido. Es muy fácil olvidarse de uno o tomar la dirección equivocada, de modo que vale la pena memorizar bien el trazado y los saltos. Tenga presente que más de uno ha sido eliminado por error en el trayecto.

Aparte del recorrido en general, se deben estudiar los giros para entrar a los saltos. Decida cuánto se deberá abrir para entrar recto a ellos. Recuerde que la penalización por tiempo es costosa y si escoge mucha amplitud en cada giro, se arriesga a exceder del tiempo.

Camine el recorrido que montará, y mientras lo hace, imagínese montando a su caballo. Mida los pasos de calles y entres dobles y triples, además observe cualquier peculiaridad del terreno.

Tras haber caminado el trayecto, pare y estudie los saltos, y repáselos en su mente. En una competencia importante, es aconsejable andar el recorrido dos o tres veces, para conocerlo a la perfección. Cuando vuelva al box de su caballo, siéntese con calma y visualice su monta por ese camino, saltando cada obstáculo.

Asegúrese de saber con exactitud dónde empezar y dónde acabar, así como cuál será la señal de inicio: una campana, un silbato, u otro. La regla de oro: espere la campana. Un recorrido limpio a veces se echa a perder por no haber estudiado bien el recorrido, de modo que ¡concéntrese al reconocerlo!