El caballo Pura Sangre Inglés fue creado a partir de la cruza de yeguas nativas de Inglaterra (grandes y muy fuertes), con caballos de raza Árabe, que no son tan grandes, pero sí muy veloces y resistentes. Esta cruza se empezó a finales del siglo XVII y principios del XVIII, cuando se importaron a Inglaterra estos sementales. El resultado fueron caballos de gran tamaño, pero de huesos finos, veloces y capaces de recorrer distancias largas con peso en sus lomos. Es por esta razón que las carreras de caballos Pura Sangre Inglés normalmente son de distancias largas (arriba de la milla), y por lo mismo requieren de una pista larga (como el óvalo de un hipódromo) donde puedan desempeñar tales recorridos.

Consideraciones importantes

Todos los caballos Pura Sangre Inglés cumplen años el día 1º de enero en el hemisferio norte sin importar el día y mes del año en el que hayan nacido. Esto con el fin de homologar las edades de todos; esta regla de la raza hace que sea un factor importante a considerar, sobre todo en los potros que debutan en las carreras, que es a los dos años de edad.

Se dice que un caballo es adulto cuando ya tiene “la boca hecha”, alrededor de los cinco años (cuando ha terminado de mudar todos los dientes temporales y han terminado de brotar los permanentes). Si los potros debutan a los dos años (en plena pubertad), habrá diferencias en su madurez, ya que algunos nacieron en enero y otros en abril o mayo. Tal vez esta es una de las razones por las cuales muchos caballos que pudieron haber sido grandes atletas no lo han sido, ya que antes de mostrar todo su potencial como corredores se lastimaron cuando aún estaban en entrenamiento o en alguna carrera cuando todavía no estaban lo suficientemente maduros.

Otra regla de la raza, es que la única forma permitida de cruza es la monta natural. En el Pura Sangre Inglés no se permite la inseminación artificial ni la trasferencia de embriones. En el caso de que un semental tenga mucha demanda, esta medida va a hacer que no haya una sobreproducción de potros, ya que un semental maduro, con buena libido, con producción de semen de buena calidad y bien manejado, normalmente podrá dar dos montas diarias, y en algunas ocasiones hasta tres. Por ejemplo, en el 2013, el semental que más yeguas sirvió (210) fue Into Mischief. De esta forma, los sementales se mantienen bien cotizados.

Características particulares de la crianza

La fisiología reproductiva de la yegua de esta raza es que es poliéstrica estacional de días largos (en temporada reproductiva presenta varios ciclos estrales). Un ciclo estral dura 21 días en promedio. La temporada reproductiva normal en la yegua es de finales de marzo a finales de septiembre, con un período de anestro (ausencia de ciclos estrales) en invierno y con dos fases de transición, una del anestro al estro antes de la primera ovulación de primavera, y la segunda del estro al anestro después de la última ovulación en el otoño. De todas las yeguas, alrededor de un 20 % ciclan todo el año, cuyo número se incrementa conforme se acercan a la línea del Ecuador.

A grandes rasgos, la estacionalidad de la yegua está íntimamente ligada a la cantidad de horas luz que tiene el día. Su glándula pineal registra los estímulos luminosos: entre menos luz produce más melatonina (la cual se produce en la noche) y si las noches son más largas incide negativamente en la producción de GnRH (hormona liberadora de gonadotropinas) por el hipotálamo, y al haber una ausencia de GnRH, la glándula pituitaria producirá gonadotropinas (FSH y LH).

Por lo anterior, se les debe sacar del anestro y tenerlas ciclando, por ejemplo, con una ovulación a principios de febrero. Para lograrlo, deben estar en un régimen de luz artificial 60 días antes (entre el 15 de noviembre y el 1º de diciembre). La luz se enciende antes de que oscurezca y se apaga alrededor de las 23:00 horas, para darles de 14 a 16 horas de luz. No más, no menos.

Ciclo estral en la yegua

Se divide en dos fases, una folicular o estro (conocida como “calor”) y la fase lútea o diestro. La primera dura en promedio de 4 a 6 días y en la cual hay desarrollo de uno o varios folículos en los ovarios (aquí, la yegua acepta al garañón y termina con la ovulación); entonces comienza la fase lútea o diestro, con una duración de 16 a 17 días, en la cual tenemos un cuerpo lúteo funcional y se caracteriza por el rechazo de la yegua al garañón. En caso de que quede preñada, durante el diestro su cuerpo reconocerá la gestación y bloqueará la producción de prostaglandinas para que no entre en calor de nuevo para que el embrión se implante y continúe con su desarrollo.

El ciclo estral de esta especie es muy largo, pero el período fértil de la hembra es de alrededor de 6 horas después de la ovulación, por lo que el desarrollo folicular debe ser monitoreado de cerca para determinar el momento adecuado de la monta, de preferencia antes de la ovulación. Si una yegua es servida y no ovula, se deberá repetir la monta a las 48 horas y así sucesivamente hasta que ovule. Sin embargo, repetir los servicios de los caballos puede ser en detrimento de su rendimiento, sobre todo si el número de yeguas a servir por dicho semental es alto.

En las yeguas Pura Sangre Inglés es común utilizar el “calor del potro”, que es el primer “calor” que presenta la yegua después de parir. Ocurre alrededor de los 9 días posparto y es un periodo fértil debido a que por el tipo de placentación que tiene (epitelio-corial difusa), la involución uterina es rápida. Existe la creencia de que es el periodo más fértil de la yegua y que si no se aprovecha, va a ser más difícil que geste después. Sin embargo, la realidad es que esta posibilidad es de alrededor del 50 contra un 80 % en calores subsecuentes, aunque hay estudios que indican que la posibilidad de gestar una yegua en el calor del potro aumenta si la ovulación ocurre después del día 10 posparto.

Nacimiento y desarrollo de los potros

Por otro lado, en situaciones naturales, los potros empiezan a nacer en marzo, cuando el clima es más benévolo para el recién nacido y las praderas empiezan a retoñar, permitiendo así que las yeguas tengan una mejor producción de leche lo cual se verá reflejado en una mejor lactancia; sin embargo, debido a que los potros cumplen años el 1º de enero, todos los criadores quieren que sus potros nazcan lo más cercano a esta fecha, cuando en situaciones normales no ocurre. Lo que se busca es que tengan cierta ventaja de madurez al momento de su debut como corredores, comparados con potros nacidos más tarde. De hecho, los potros nacidos en enero, febrero y marzo son conocidos como “potros bien nacidos”, mientras que los nacidos en abril y mayo se conocen como “potros mal nacidos”.

Por todo lo anteriormente descrito, la crianza del caballo Pura Sangre Inglés es especial y diferente en algunos aspectos a la crianza de caballos de otras razas, ya que se tiene “prisa” de que se preñen las yeguas lo antes posible para tener la mayor cantidad de potros “bien nacidos”.